Carlos Salvador, diputado de UPN sobre Amaiur (olvidando, se supone, que se trata de una coalición formada también por Eusko Alkartasuna y Alternatiba, además de por la llamada Izquierda Abertzale)
"Jamás mostraron ninguna compasión ni cercanía con los amenazados, los exiliados o con los familiares de los asesinados por ETA".
Interesante apunte tomado de El Mundo (21-12-11). La compasión es una palabra fundamental para escribir y estudiar la historia sobre lo que ocurrió en torno al denominado conflicto vasco. Su ausencia refleja la deshumanización de muchas actitudes y planteamientos, contagiados en la política y sociedad durante estas últimas décadas, y no exclusivos de una sigla, ni exclusivamente en el entorno terrorista. Todavía falta mucha compasión a día de hoy, sinónimo de empatía.
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En el editorial de Diario de Noticias (18-12-11) se habla de "la insensibilidad, la frialdad, la inhumanidad y hasta un insultante y desafiante desprecio mostrados siempre por la izquierda abertzale", actitudes que "han sido la columna vertebral de su actuación pública".
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