30 enero 2018

Operación relato monárquico

La participación de Felipe VI en la operación de Estado tras el 1-O traía una triple hipoteca: olvidaba su labor de arbitraje, impulsaba el ideario PP-Cs arrastrando al PSOE, y bajo el principio monárquico jerárquico de dejarle bien parado, apuntalaba la estrategia hacia el 'cueste lo que cueste'. Las tesis de Felipe VI perdieron las elecciones en Catalunya.   Su pérdida de prestigio se entiende mejor recuperando unas palabras del ex jefe de la Casa del Rey, Sabino Fernández Campo (hoy ya fallecido) en la obra Historia de la democracia (El Mundo, 2005). "Duro es el papel del Rey" afirmó. "Ha de constituir en todo momento un modelo para los ciudadanos. Ha de ostentar la más elevada autoridad moral (...)". Para Fernández Campo el objetivo general de la Monarquía es "colocar a la política en un plano de dignidad y elevación de miras (...)". Según él, "la escasez de "potestad" del Rey se compensa con el crecimiento de la "autoritas", "base que permite al Rey ejercer ese poder de moderar y velar por el regular funcionamiento de las instituciones".

Ahora, hagámonos una idea de lo que  discurso del 3 de octubre en Catalunya.

No hay comentarios: